– Problemas de memoria o de razonamiento.
– Mareos que empeoran al pasar de estar acostado o sentado a estar de pie.
– Dolor muscular o articular.
– Sueño que no es reparador.
– Dolor de cabeza, dolor de garganta y ganglios linfáticos sensibles en el cuello o las axilas.
– Sensibilidad a la luz, al sonido, a los olores, a los alimentos y a los medicamentos.
No se sabe qué causa el SFC, pero puede estar relacionado con factores genéticos, infecciosos, traumáticos o metabólicos. No hay una prueba específica para diagnosticar el SFC, por lo que se debe descartar otras enfermedades que puedan causar síntomas similares. El tratamiento del SFC se basa en aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida de las personas afectadas. No hay una cura para el SFC, pero algunas personas pueden mejorar con el tiempo.
El SFC es una enfermedad que puede tener un gran impacto en la vida personal, familiar, laboral y social de las personas que la padecen. Por eso, es importante reconocer sus síntomas, buscar ayuda médica y recibir apoyo psicológico y social adecuados.
Fuentes:
– Encefalomielitis miálgica o síndrome de fatiga crónica – Síntomas y causas – Mayo Clinic
– Síndrome de fatiga crónica: MedlinePlus en español
– Síndrome de fatiga crónica: qué es, síntomas y tratamiento – MD.Saúde